La cohesión de la mesa de diálogo, en la que se discuten las reformas a la Ley N.° 30 ó "9 en 1", es frágil.
La última sesión del pasado miércoles concluyó de forma abrupta con un amago de los sectores sindicales de abandonar la discusión.
El pasado fin de semana, durante la Asamblea de Dirigentes Populares, los representantes de CONUSI y SUNTRACS en la mesa de diálogo fueron autorizados para levantarse de la mesa si en el debate no existen las condiciones de imparcialidad.
Las fricciones entre sindicalistas y los voceros del sector empresarial son cada vez más evidentes. En el día de hoy, debe definirse una moción del ala sindical que pidió ampliar la mesa del diálogo con tres nuevos representantes: uno por la parte ecológica, otro por la comarcal y uno más por la sindical, de la provincia de Bocas del Toro. En la mesa se aprobó el envió de una nota a la dirección de la CSS, en la que solicitan la atención médica de los heridos en las protestas, la pensión por invalidez de los que quedaron lisiados y la rebaja de la edad de jubilación para quienes trabajan en las bananeras a 54 para las mujeres y 57 para los varones.