Los estudiantes graduandos están haciendo un llamado a los profesores para que retornen a clases. Los alumnos temen perder el año escolar y ver así frustrados sus planes para iniciar una carrera universitaria.
Se requiere de la reflexión de la dirigencia magisterial y que cese el enfrentamiento entre gobierno y docentes. La realidad es que un aumento salarial de 190 balboas mensuales no es viable.
Gobierno y profesores están inmersos en un enfrentamiento estéril, donde al final sólo habrá perdedores, sobre todo el estudiantado panameño que está perdiendo clases que nunca se recuperan.
Pareciera que estamos en un diálogo entre sordos, donde se actúa más para el show de las cámaras de la televisión, en vez de buscar una solución a la crisis de la educación.
Todo indica que no hay un mediador capaz de sentar a las partes a conversar de manera respetuosa y dudamos que algún organismo acceda a facilitar una conversación entre sectores que lo que menos quieren es llegar a una solución sensata.
Frente al peligro de perder el año escolar, ya el Ministerio de Educación debería contar con alguna alternativa para no interrumpir tanto las labores de enseñanza-aprendizaje.
Con las facilidades de una televisión educativa y herramientas como el internet y las infoplazas, ya deberían existir programas por materias, para que los estudiantes tengan la opción de lograr conocimientos a través de esas vías.
Todo indica que la insensatez del gobierno y docentes seguirá por algunos días más o cuando alguna de las partes se canse; mientras hay que hacer algo en beneficio de nuestra juventud.