El proyecto turístico de Isla Viveros no sólo se ha convertido en la manzana de la discordia que tiene en pugna a dos sindicatos, sino que también, producto de ella, se ha derramado sangre de hombres trabajadores que se han dejado gobernar por las pasiones.
El proyecto de Isla Viveros tiene un año y 4 meses de estarse desarrollando.
En enero de 2006, un grupo de líderes chiricanos se acercó a las oficinas de Maqtec, donde firmaron una convención colectiva hasta el 2010
La convención colectiva con SINTICOPP tiene los mismos parámetros que el SUNTRACS, que acusa a Maqtec de trabajar sin permisos de construcción, no pagar las cuotas al Seguro Social, entre otros puntos, cosa que no es cierto, según el ingeniero De la Cruz, representante de Maqtec.
Según De la Cruz, el mayor problema es que no pueden concebir que en un proyecto tan grande, no tenga la bandera sindical del SUNTRACS.
El SINTICOPP es un sindicato pequeño, uno de los 12 existentes adicional al SUNTRACS y sólo cobra el 1% en cuota sindical, mientras que el SUNTRACS cobra un 2%.
En la actualidad, sólo 35 obreros pertenecen al SUNTRACS.
Según la inspección del Ministerio de Trabajo, no hay méritos para paralizar el proyecto, contario a lo que sostiene el SUNTRACS.
SINTICOOP al igual que Maqtec, tienen una convención colectiva con Odebrecht. donde De la Cruz es el representante técnico del proyecto.
Según Gustavo De la Cruz, SUNTRACS, siente que él es un tipo peligroso, porque al igual que SINTICOPP están en Viveros y en Odebrech que es un monstruo de la construcción.