El Manito de Ocú culminó ayer con el desfile tradicional, donde unas 40 delegaciones tanto del centro, como de regiones aparatadas de todo el distrito de Ocú, estuvieron presentes.
Desde el jueves cuando fue inaugurado el festival, pasaron más de 25 representaciones folklóricas de todo el país en los terrenos de la feria de San Sebastián.
La noche del sábado fue presentado el "Duelo del tamarindo" frente a cientos de espectadores. Esta es una representación ancestral, de cómo se desarrollaban los bailes bajo frondosos árboles de tamarindo, muy comunes en Ocú . Trata sobre las disputas entre los "manitos" por su honor y que al final de la jornada tenía regularmente una víctima.
Otro de los atractivos fueron los bailes de Yin Carrizo y Dorindo Cárdenas, dos leyendas que abarrotaron las plazas bailables
Angela Torres de Aizprúa, presidenta del patronato del Manito, dijo que la fiesta tiene un costo aproximado de $20 mil, cuyo principal renglón es la alimentación y el traslado de las delegaciones de las diferentes regiones o escuelas que hacen el festival.
Además el costo del limpieza, pago de electricidad, limpieza y la premiación de los diferentes concursos que se desarrollan durante el festival.
La principal fuente de ingreso lo representa el aporte gubernamental del INAC e IPAT con 5 mil dólares cada uno y el FIS que otorga 3 mil.
El resto es parte de la autogestión y los padrinazgos que logra el patronato.
DESDE MUY LEJOS
Si hay algo que tiene el "Manito" es que guarda celosamente la tradición. Cada delegación es más auténtica que la otra, que muchas veces llegan de regiones de difícil acceso y caminos en muy mal estado al desfile, lo que dentro del festival es la mayor atracción.
"El Penitente de la Otra Vida", "El Bendito y "Carga del Rancho" son algunas de las estampas que presentan las delegaciones que desde 1967, año en que se inició el Festival, son la médula espinal del evento y quienes organizan las delegaciones, que deben representar a cada uno de los siete corregimientos del distrito.