El proyecto de ley por el cual se obliga a las empresas operadoras de redes de telecomunicaciones fijas y móviles a levantar una base de datos de sus usuarios, popularmente conocida como "ley de los "pinchazos", fue presentado finalmente anoche al pleno de la Asamblea por el ministro de Gobierno, José Raúl Mulino.
En síntesis, Mulino explicó que el sistema SUME 911 sería el depositario de la base de datos que las empresas telefónicas deberán estructurar con el nombre, número telefónico y residencia de sus clientes.
Señaló que en el caso de las empresas prestadoras de servicios de telefonía básica que manipulen las conexiones 101 (llamada por cobrar), 102 (asistencia al directorio), 103 (bomberos), 107 (asistencia celular), 106 (larga distancia por operadora) deberán enviar igualmente la base de datos al SUME 911, con la información personal básica para la ubicación física del usuario.
La ley, según el funcionario, obliga al SUME 911 a mantener en estricta reserva y bajo el amparo de la ley de confidencialidad los datos suministrados por los operadores.
El proyecto plantea que las empresas operadoras del servicio de telefonía deben tener a disposición del SUME 911 una radio base que permita triangular un equipo celular, cuando se requiera su localización.
Mulino indicó a los diputados que la normativa será una herramienta para levantar otra base de datos sobre equipos reportados como robados, hurtados o perdidos.
La comparecencia del Ministro también fue con la intención de presentar el proyecto de ley que deroga el Decreto de Ley N.º9 del 20 de agosto de 2008 que creó el Servicio Nacional de Inteligencia y Seguridad (SENIS).