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El jugadro Edú (de pie) pelea la pelota con Tomas Hrdlicka en el partido de ayer.  |
El Celta de Vigo español superó ayer en todas las facetas al Slavia de Praga checo y se hizo merecedor de un resultado que lo confirma como candidato a estar con los grandes de Europa dentro de quince días.
No obstante, los primeros remates de cierta claridad fueron mal dirigidos y el guardameta Radek Cerny salvó el peligro sólo con buena colocación.
El dominio celeste logró su concreción a balón parado en un libre directo que el árbitro mandó repetir para que Alexandre Mostovoi descubriera el pequeño error de ubicación de la barrera visitante y situase el 1-0 en el minuto 17.
Con el resultado en contra, el Slavia estiró líneas ligeramente sin excesivo afán y consiguió acercarse con cierto peligro en los centros de rosca del brasileño Adauto desde el córner y un par de lanzamientos desviados de Richard Dostalek desde la frontal.
A pesar de que el ritmo céltico bajó de pulsaciones, hubo varias ocasiones desperdiciadas por los hombres de Miguel Angel Lotina para aumentar la ventaja, la más clara a poco del descanso en un centro preciso de Sylvinho que Savo Milosevic envió fuera sin apenas oposición de su marcador.
En la segunda parte, la mayor calidad del conjunto vigués impuso su dominio. Jesuli disipó dudas con un gol de bandera por el ángulo y Edu remachó la victoria poco después al aprovechar un rechace del meta Cerny a disparo de José Ignacio. |