El mandatario Ricardo Martinelli rememoró ayer que durante el tiempo que fue oposición y durante la campaña política fue el que más criticó los pinchazos telefónicos y la "sapería" estatal, por lo que manifestó que sería el primero en rechazar una ley encaminada a propiciar el espionaje telefónico desde el Gobierno.
"Yo me quejé mucho cuando estuve en campaña de los pinchazos telefónicos y sería la última persona que propondría o apoyaría una ley que tenga que ver con esto porque no es correcto", enfatizó Martinelli.
Consideró que existe confusión con el objetivo de la ley, ya que lo único que pretende es identificar el número de dispositivo dentro de una red con protocolo IP cuando una persona utilice este sistema con fines indebidos.
"Han querido malinterpretar el fin y el propósito de la misma.. Es para tener la opción de que los celulares prepagados, que hay más de un millón y medio, no se utilicen para robos o secuestros y que sepamos quién es el dueño", explicó el mandatario.