Leire Otaegi, periodista de la radio holandesa, entrevistó a Alí Mojtar, representante del pueblo saharaui en España, quien esbozó la inquietud sobre el futuro del territorio ubicado en el África del Norte. El mandato de la misión de la ONU para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO) se prolonga seis meses más. Una medida que no sorprende a nadie, ya que hasta la fecha los avances en el acuerdo de cómo y, sobre todo, quiénes participarían en esta consulta, son casi nulos.
Naciones Unidas lleva 11 años intentando elaborar las condiciones de un referéndum que decida entre la independencia del Sáhara Occidental o su anexión a Marruecos. El Consejo de Seguridad de la ONU, ante el vencimiento del mandato MINURSO, ha decidido por unanimidad prolongarlo medio año. Las partes enfrentadas; el Frente Polisario y el gobierno de Marruecos, han sido llamados a facilitar una cooperación constructiva y diplomática que permita solucionar sus diferencias.
El Consejo pidió al enviado especial, James Baker, que retome las negociaciones. La ex colonia española ha padecido, desde 1975, cerca de 26 años de ocupación marroquí y 16 de guerra. Años de sufrimiento y espera para un pueblo que ve cómo la resolución definitiva de su futuro se vuelve a aplazar.
Con un presupuesto superior a los 50 millones de dólares y un total de 540 personas trabajando en esta misión, el Consejo de Seguridad de la ONU reconoció que nunca se han conseguido las condiciones mínimas para la celebración del referéndum.
VARIEDAD DE PROPUESTAS
El Consejo parece decantarse por la autodeterminación y encuentra en el "borrón y cuenta nueva", la única manera de desatascar el proceso. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, presentó el pasado mes de febrero un plan que recogía cuatro opciones:
w La organización del referéndum que decida entre la independencia o la anexión a Marruecos, solución que se lleva en discusión desde 1991 y en 1992 debió efectuarse la consulta popular, nunca realizada. w Compartir (o dividir) Sáhara Occidental.
w Una autonomía saharaui bajo soberanía marroquí. El Frente Polisario, que aspira a la independencia, se negó a la misma y Argelia tampoco acepta esta opción. w La disolución de la misión de la ONU para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO), alternativa a la que se opone el Consejo de Seguridad y que arroja dudas sobre la continuidad del proceso negociador.
Las divergencias de las partes en conflicto y la falta de confianza han imposibilitado la puesta en práctica de estas alternativas propuestas por Kofi Annan. Pero éstos no son los únicos planes sobre la mesa. EU, con el respaldo de Francia y Reino Unido, propone favorecer la autonomía del Sáhara Occidental bajo el control de Marruecos.
El llamado "Acuerdo Marco" defendido por estas tres potencias, descarta la celebración de un referéndum de autodeterminación. El descubrimiento de ricos yacimientos de petróleo en la costa saharaui y el interés ya manifestado de compañías petroleras francesas y estadounidenses por el control de estas reservas de oro negro, están guiando la participación de estos países en el conflicto que sufre en pueblo sarahaui.
Ahmed Bujari, representante del Frente Polisario ante la ONU, ha rechazado este acuerdo argumentando que supondría entregar el pueblo y el territorio saharaui a un poder colonial. El Consejo postergó el debate.
En un momento en el que la población civil parece llegar al límite de su paciencia y resistencia, y con miles de refugiados esperando una solución estable que les permita regresar a su tierra, el temor de que la guerra se reanude parece tener fundamento.
"Estamos cansados de esperar un espejismo que nunca llega", declaraba un dirigente del Frente Polisario. En el 2002, diez años después de la fecha marcada para el referéndum, la ONU ha sido incapaz de resolver el futuro del Sahara Occidental. |