Soy de esos individuos a quienes es difícil hacerles decir que "SI", sólo porque todo el mundo así se expresa: será por eso que me han colgado la etiqueta de ser el "Abogado del Diablo", debido al hecho que mis razonamientos no siempre van necesariamente en la dirección de los demás. Dice David Goldberg: "...Generalmente se cree que el primer deber del soldado es morir por su patria. No es así. Su primer deber es procurar que el soldado enemigo muera la suya...".
Como ya es público, el incidente desarrollado en los predios de la Presidencia de la República, provocó que el gobierno decidiera "separar" de su cargo al Jefe del SPI, Comisionado José Gómez.
Con el respeto, y plenamente identificado con el dolor que embarga a todos los familiares del SIRA, quiero hacerle la siguiente pregunta al "gobierno", específicamente al Ministro de la Presidencia, Su Excelencia Ubaldino Real: Siendo cierto que el SPI fue creado para proteger y salvaguardar las instalaciones físicas del Palacio de las Garzas, ¿cuál debió haber sido la actuación de los agentes ese día cuando se vieron "apechados" por la turbamulta que no solo querían penetrar de todas maneras el cerco humano formado por los uniformados, sino que inclusive, enardecidos, también agredieron a los agentes del orden público con puñetazos, bofetadas, bastonazos, patadas, "empellones", etc. dispuestos a penetrar a como diera lugar?
Otra pregunta: Si los agentes no hubieran actuado, en virtud de la razón de sus funciones como custodios oficiales de las instalaciones de la presidencia, ¿cuál hubiese sido hoy la posición que usted hubiera adoptado, Señor Ministro, al saber que esos agentes habían permitido que los manifestantes franquearan, sin ninguna resistencia, en una especie de "calle de honor", hasta llegar a las mismas escalinatas de la presidencia? De seguro que usted hubiera ordenado no sólo la "separación" del Jefe Gómez, sino que también habría ordenado el despido inmediato de todos esos agentes que hoy son cuestionados por el solo hecho de haber cumplido con su deber.
Sé que con este artículo me haré querer mucho menos que antes, pero siendo como dicen que soy, "El Abogado del Diablo", remito a mis malquerientes a lo que dice Sacha Guitry, a saber: "...Si los que hablan mal de mi supieran exactamente lo que yo pienso de ellos, aún hablarían peor..." ¡Au Revoir!