En tanto, ayer especialistas de Criminalística, Medicatura Forense, expertos laboratoristas e investigadores del Ministerio Público viajaron hasta la comunidad de Aguacate, en el corregimiento de Tierra Oscura, provincia de Bocas del Toro, donde continuarían las excavaciones para dar con más evidencias contra el asesino en serie.
El martes pasado un grupo de ellos localizó dos osamentas a unos 340 metros de la casa identificada como Hacienda Cortez. Éstas estaban sepultadas bajo un basurero, lo que junto con la cal regada a los cuerpos, disminuía el mal olor del proceso de descomposición. Se presume que los cuerpos fueron trasladados hasta el basurero, a bordo de un pick up de color azul, que está estacionado cerca a la casa.
Ayer, durante las excavaciones, se encontraron por lo menos 30 pedazos más de huesos y una sortija presuntamente de oro con diamantes incrustados y con la forma de la cara de un indio apache.
El personal del MP continuará las investigaciones, pues vecinos del lugar aseguran que una familia de tres miembros de apellido Brown, fue vista con los esposos Cortez hace tres años y desde entonces desapareció.
También se ha dicho que hay dos indígenas de entre 19 y 23 años de edad, que salieron de sus casas hacia una finca de Cortez, hace tres meses, y no han regresado a sus hogares.
