En la calle 19 Barraza, ocurrió un hurto de lo más sorprendente.
Según testigos, el ciudadano Ismael Fernández, de 87 años, se calló accidentalmente. Al caer, se le salió su arma; luego, siete sujetos que lo vieron caer no desaprovecharon la oportunidad.
La pandilla de los siete, hasta el momento no detenida, se llevaron el revólver calibre 38 marca Armscor, con cinco municiones, del ciudadano que se percató de lo sucedido algunos segundos después.
Aparentemente, cuando los sujetos vieron el arma, hicieron como si fueran a ayudar al ciudadano. Según testigos, la víctima se había tomado algunos tragos.