La muerte de Marlen Quezada, de 34 años, fue a manos de dos pandilleros del área de Curundú, que empezaron "a tirar bala a lo loco" y hacia donde estaba la gente, informó una fuente.
Las autoridades ya tienen identificados a un sujeto mayor de edad y a otro menor, presuntamente responsables del hecho.
Se conoció que uno de los sujetos agotó todas las balas que tenía dentro del arma.
La violencia en Curundú ha cobrado la vida de muchos inocentes y parece que estos hechos no tienen fin.