Después del terrible accidente ocurrido en Los Algarrobos, distrito de Dolega, los chiricanos no podían contener el dolor de sepultar a los jóvenes que murieron en esta tragedia.
El cementerio municipal estuvo repleto de familiares de los jóvenes Walter Garcés, Genarino Rosas, William Rodríguez y los hermanos Javier y Raúl Ponce. Todos querían darle el último adiós, pero en esta ocasión lo hicieron estando ellos en ataúdes distintos.