Es evidente el alto consumo de bebidas alcohólicas en jóvenes en la ciudad de Santiago cuyos efectos les deja pérdida del conocimiento, a tal punto que terminan durmiendo en cualquier lugar o haciendo sus necesidades en donde ellos crean conveniente.
Casi todos los días se encuentran personas como esta en completo estado de ebriedad y que además exponen sus vida en las calles, por el riesgo de causar accidentes de tránsito, otros son objetos de hurto y hasta de supuestos abusos.
Van varios casos de atropellados por vehículos porque la mayoría de los embriagados se acuestan y se duermen en medio de las carreteras o en las orillas, lo que provoca lamentables accidentes en muchos conductores por tratar de salvarlos, se vuelcan dejando a otras personas heridas y con secuelas graves.
En Calle Quinta Final de Santiago, constantemente se observan estas personas en su mayoría jóvenes indígenas, caídas por los efectos del consumo del alcohol en los bares que están cerca del mercado público y que luego caminan y se tienden en la calle como dueños y señores de ellas.
Los conductores y moradores se quejan por que algunos fomentan riñas callejeras escándalos y otros hacen sus necesidades fisiológicas ante la presencia de damas.