El estadounidense Floyd Landis, uno de los máximos favoritos al triunfo en la presente edición del Tour de Francia y segundo en la general, deberá ponerse una prótesis en la cadera entes de que finalice el verano, según explicó ayer en la jornada de descanso.
Sus problemas se remontan a un accidente que tuvo en enero de 2003 mientras se entrenaba en California y una caída le produjo la fractura del fémur de su pierna derecha.
Una de las consecuencias de este tipo de lesiones se traducen en una necrosis de la cabeza femoral, que actualmente no está reducida, según explicaron médicos.