El jefe del Tribunal Especial Iraquí (TEI), Salem Chalabi, pidió que los 11 ex altos funcionarios del derrocado régimen de Saddam Hussein que fueron informados de cargos en su contra, sean aislados entre ellos para evitar que coordinen sus declaraciones.
"Por ahora, solo el número uno (Saddam Hussein) está aislado de los otros y es dañino para la investigación que ellos puedan coordinar sus declaraciones", afirmó Chalabi después de la audiencia en la que se presentaron los cargos el jueves pasado.
La otra razón que se impone a favor del aislamiento de cada uno de los 11 ex altos funcionarios del régimen de Saddam es de facilitarles las negociaciones que permitan a un inculpado cooperar con la investigación.
A Saddam Hussein se le imputaron siete cargos por los cuales el derrocado presidente iraquí fue acusado de "crímenes contra la humanidad", y al igual que sus ex funcionarios podría ser condenado a la pena de muerte, según un código de proceso criminal de 1971.
Chalabi confirmó que su país estaba tratando de restablecer la pena de muerte, que fue suspendida por la coalición en abril de 2003.