El acto de traspaso de mando de la Policía Nacional no sólo estuvo plagado de contenido formal, también hubo muchos hechos curiosos.
Un anuncio que causó euforia
El discurso del Presidente de la República, Ricardo Martinelli, había generado muchas expectativas entre los presentes.
El Mandatario puso la tónica diferente cuando anunció que el discurso que había preparado desde hacía tres días, no lo iba a utilizar, porque prefería hablarles a los allí presente "de corazón".
Eso arrancó la primera oleada de aplausos entre los asistentes.
Pero el clímax de la euforia que allí se vivió ocurrió cuando al anunciar los prometidos aumentos salariales de entre 100 y mil dólares para los rangos entre agente y comisionados de la Policía Nacional, anunció que los dineros provendrían de la gran cantidad de "botellas" que se habían quebrado lo que habría permitido reducir el presupuesto de la Asamblea Nacional en 20 millones de dólares.
En los rostros de las unidades policiales se dibujaban sonrisas cuando se especificaba el monto del aumento a cada rango, varios de los cuales aplaudían a más no poder.
También llamó la atención las disculpas que pidió el Presidente Martinelli por llegar tarde a la ceremonia y la promesa de que acompañará a las unidades policiales en la lucha por lograr que en Panamá existan calles más seguras.
Fue una jornada que duró poco más de una hora, pero que llenó las expectativas de muchos.
