El aplastante dominio de las hermanas Williams en Wimbledon, donde acumulan siete títulos entre las dos, ha vuelto a ponerse de manifiesto en semifinales, por lo que reeditarán el mismo duelo del año pasado, mañana, en la pista Central del All England Club.
La vigente campeona, Venus Williams, ha humillado a la rusa Dinara Safina, tremendamente desacertada durante todo el partido -16 errores no forzados por sólo uno de su rival-, y le han bastado 51 minutos de juego para castigar con un decepcionante 6-1 y 6-0 a la número uno del mundo.
"Es decepcionante acabar el partido en menos de una hora y habiendo ganado tan sólo un juego", admitió una abatida Safina, quien subrayó que su rival le dio un importante "repaso" en el duelo que mantuvieron ayer.
Sobre la rusa, quien ya había tenido dificultades en las dos rondas anteriores y que era la única de las cuatro semifinalistas que sí había cedido algún set antes de llegar a semifinales, parece pesar como una losa las voces que critican que ocupe el número uno del mundo cuando nunca ha ganado un Grand Slam.
La hermana pequeña de la familia Williams, Serena, lo tuvo mucho más difícil frente a la rusa Elena Dementieva, con quien libró una emocionante batalla en una de las semifinales más largas de la historia del cuadro femenino en este torneo y a la que derrotó finalmente por 6-7(4), 7-5 y 8-6.
Dos horas y 49 minutos de igualdad en los que largos peloteos y un fuerte servicio por parte de las dos jugadoras hicieron las delicias del público de la pista Central del All England Club.