Después de unos cuantos meses de una relación amorosa, ya debes tener una idea de con qué tipo de hombres te puedes encontrar. Vamos a dividirlos en cinco grandes grupos para que te sea más fácil clasificarlo y encontrarle el lado favorable a sus "desaciertos e inconvenientes", pero sobre todo para aprender de ellos.
Empecemos por los mujeriegos empedernidos. Son adorables, tienen un encanto particular, utilizan muy bien cada palabra que expresan, y por lo general, son muy seguros de sí mismos. Pueden llevarte a las nubes, te hacen sentir que eres una reina, aunque luzcas como esclava. Sin embargo, este tipo de hombre, que a ninguna mujer le conviene, no te mostrará ningún tipo de respeto, sólo piensa en él mismo y su ego es demasiado grande para ser llenado por una sola mujer.
El verdadero problema de sus actuaciones radica en que internamente no se sienten seguros, y necesitan mucha atención femenina.
Dentro del segundo grupo están los que son demasiados competitivos. Para ellos todo es una verdadera rivalidad y ganar es lo más importante de todo. Si tu conquista entra en este grupo, entonces tendrás que aprender a competir.
Este tipo de hombre es apasionado, entusiasta, versátil, bastante perfeccionista y muy buen amante.