Un hincha portugués falleció de un infarto tras ver el partido de Portugal contra Holanda y otro se produjo una lesión cerebral al caer de una estatua de diez metros en el centro de la capital cuando celebraba la victoria de su selección.
Según informaron ayer fuentes oficiales que no facilitaron los nombres de las víctimas, el hincha fallecido era un hombre de 61 años.