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El presidente argentino Néstor Kirchner sigue abriendo nuevos frentes a cuatro semanas de asumir, y ahora lanzó una cruzada para combatir la evasión fiscal, con el telón de fondo de nuevas negociaciones con el FMI.
El objetivo del gobierno argentino es poner en funcionamiento un "drástico plan para mejorar la recaudación y terminar con los vicios" argentinos, según definió el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
La evasión fiscal en Argentina es históricamente alta, y si bien no hay registros oficiales podría rondar el 40% en el caso solamente del impuesto al consumo (IVA), destacó la prensa local.
El ministro de Economía, Roberto Lavagna, anticipó que las medidas apuntan a combatir "la constitución de sociedades que se crean exclusivamente para facilitar la evasión", y a "evitar los sistemas de evasión y maniobras observados en los últimos años en materia de exportaciones".
También buscan contrarrestar "la emisión de facturas (boletas) falsas; la falta de límites en la actual normativa cuando se trata de crear crédito fiscal; el aumento del hábito de no emitir comprobantes, la complejidad de muchas normas y ciertas ambigüedades". |
