Suiza tratará hoy de pescar tres puntos, que le dejarían muy cerca de la clasificación para octavos, en las revueltas aguas de Togo, sacudido por un conflicto sobre las primas que estuvo ayer a punto de provocar una huelga de los "Gavilanes".
Tras una mediación de la FIFA, los jugadores de Togo se decidieron finalmente partir con destino a Dortmund, tras haber amenazado con no jugar el partido mientras no se resuelvan las diferencias que mantienen con la Federación.
El Gobierno de Lomé volvió a tomar cartas en el asunto, pero el conflicto, que ya perturbó la vida de la concentración togolesa en la primera jornada, parece que continúa.
Si antes del primer encuentro contra Corea fue el técnico alemán Otto Pfister, quien abandonó el barco, ahora han sido los jugadores los que han amenazado con no ir a Dortmund, sede del encuentro contra los helvéticos.
No parece la mejor forma de preparar un partido en el que los togoleses precisan de la victoria para seguir vivos en la competición.