La cancelación de visas para ejercer la prostitución en Panamá, el fin de la inmigración ilegal y una política migratoria rigurosa para países cuyos inmigrantes son recurrentes en asesinatos, secuestros y tráfico de drogas, pondrá en marcha el gobierno de Juan Carlos Navarro, durante su primer año de gestión.
Navarro señaló que los problemas de seguridad se agravan más con la participación de extranjeros en ejecuciones de personas en sitios públicos y a plena luz del día.
Navarro aclaró que los extranjeros que lleguen a suelo patrio para hacer negocios, como turistas, para establecerse en el país o solo de visita, no tendrán ningún problema y serán tratados con toda la hospitalidad propia del panameño.