La sesión de debate del polémico proyecto de ley que crea la Zona Económica Especial Barú-Puerto Armuelles, en la Asamblea Nacional, sirvió para que la dirigencia sindical olvidara por unas horas sus diferencias y cerrara fila para rechazar en bloque un proyecto que califican de "lesivo para la clase trabajadora".
A criterio del dirigente del SUNTRACS, Genaro López, el proyecto ha querido ser vendido por el Gobierno como la "salvación" para la crisis social y de hambruna que se vive en la zona bananera, cuando en realidad es una propuesta que persigue la derrota de la clase trabajadora en materia de conquistas laborales vinculadas al pago de horas extras, días de descanso y bonos por producción.
López manifestó que so pretexto de atraer la inversión a la región, se les pide a los trabajadores que deben "entregarse" a las pretensiones de los empresarios.
Una postura más dura fue la planteada por el dirigente de CONATO, Guillermo Puga, quien manifestó que pedirá a sus aliados sindicales en Canadá que expresen su rechazo a la firma del TLC entre ese país y Panamá, de aprobarse el proyecto.
Anoche surgieron las primeras propuestas de modificación al documento, entre las más sobresalientes está la que establecería como zona 1 de salario el área bananera de Barú-Puerto Armuelles.
