Aprovechar la comida y conservarla adecuadamente son dos consejos que siempre has de tener presente para no tener que gastar de más en la compra del supermercado. - No desperdicies los sobrantes de frutas cortadas o peladas. Rocíalos de jugo de limón para evitar que se oscurezca la pulpa. Guárdalos en el refrigerador. - Si sumerges durante quince minutos las naranjas en agua caliente les sacarás más jugo. También puedes rodarlas sobre la mesa oprimiéndolas con la mano.
- Para comprobar si el huevo que tienes almacenado aún es fresco, agrega a un vaso con agua una cucharadita de sal. Disuélvela bien y coloca el huevo. Si se va al fondo significa que está fresco, pero si flota quiere decir que ya no se puede consumir y debe desecharse. - Reutiliza los envases y recipientes de yogur y mantequilla para guardar y congelar sobrantes de comida o úsalos como moldes para gelatina y flan. |