¿Por qué el populismo está tan pegado en América Latina? La respuesta, según el escritor cubano y viejo crítico de las políticas populistas Carlos Alberto Montaner, tiene dos aristas: una histórica y otra cultural.
El autor de "Manual del Perfecto Idiota Latinoamericano" tuvo duras críticas para los gobiernos de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Argentina, asegurando que emplean el populismo a diferentes niveles de intensidad. Sin embargo, no hizo ninguna mención de ninguna administración gubernamental panameña.
Durante una disertación ante miembros de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (APEDE), el autor señaló -por un lado- que el populismo con diferentes nombres y variantes ha sido la norma en la relación entre los gobiernos y sus ciudadanos desde 10 mil años.
El clientelismo, la corrupción y todos los vicios que Montaner asocia con el populismo se forjaron y perfeccionaron durante el imperio Romano y las monarquías europeas que le siguieron, y hasta hoy siguen distorsionando el ejercicio del poder.
Para la segunda explicación, Montaner hizo referencia a las teorías de Edward Banfield, quien sostenía que las sociedades atrasadas se diferenciaban de las avanzadas en lo que llamó síndrome de "familismo amoral": las lealtades y compromisos solo están entre los familiares y amigos cercanos, la política sirve para el beneficio personal, y solo se respeta la ley si implica un castigo grave.