Rita Marcela Rodríguez Fuentes de 45 años de edad pide desesperada a las autoridades correspondientes que se le haga valer y se respeten sus derechos como mujer, ya que no cuenta con un trabajo, ni una vivienda propia.
Según Rodríguez, actualmente duerme en un sillón que se encuentra dentro de la terraza de la casa que habita su mamá, padrastro y hermana, señalando que no descansa dentro de dicha vivienda por falta de espacio, la misma esta ubicada en San Pedro número uno, Juan Díaz, vivienda C3.
A pesar de las constantes peticiones de la señora Rodríguez a la Casa de la Municipalidad, por medio de cartas, solicitando se le otorgue gratuitamente, terrenos baldíos en las afuera de Pacora, Tatare o lados de Juan Díaz para personas tan pobres como ella, no ha recibido ningún tipo de respuestas, sólo le han comunicado que sus notas no fueron registradas en la computadora, ni recibidas, es decir no aparecen.
Durante cinco años Rodríguez ha vivido en una situación de pobreza deprimente, durmiendo en un sillón. También ha sido víctima de conductores de buses, ya que la califican como "piedrera", alegando que no es drogadicta y que es una mujer que conoció lo que es llevar una familia y tener un hogar, incluso dijo haber laborado vendiendo equipos médicos y hospitalarios.
La señora Rodríguez, es divorciada, sus hijos, ya adultos y nietos, viven junto a sus ex suegros. Sus ex suegros no aceptan que Rodríguez surja en su vida porque tienen miedo a que aparte a sus propios hijos y nietos de ellos, indicó.
Otro de los dolores que ha sentido Rodríguez, fue cuando su propio padre Gregorio Mario Rodríguez le tiro un animal canino, en una visita que realizo a la vivienda de su mencionado papá, ubicada en Victoriano Lorenzo de David Chiriquí.