Este año las calles de La Chorrera nuevamente recobran su vistosidad de antaño, durante la procesión al santo patrono de este distrito, San Francisco de Paula, al rescatar varias familias, los tradicionales Arcos de San Francisco.
Los arcos son una tradición de este pueblo que se estaba perdiendo, pero que al conmemorarse los 500 años de la muerte del Santo, la parroquia del mismo nombre, incentivó a los feligreses para rescatarla.
Estos son construidos utilizando tubos de PVC que cruzan de una acera a otra y sobre los cuales se colocan pencas y otros adornos además motetes con productos agrícolas para que el Santo, bendiga a los productores de la región.
Se trata de un trabajo de varios días y que se torna más intenso el mismo día de la fiesta, cuando son colocados todos los adornos en los arcos, además de las pencas tejidas a ambos lados de la vía y que son enterradas en tanques llenos de arena; además de colocárseles cintas de colores.
Parte de la emotividad de la fiesta del Santo Patrono, es cuando el Santo pasa debajo del arco y se combina el color del hábito con las luces y decoraciones .