Los dos años de edad marcan un cambio importante en lo que a patrones de alimentación del niño se refiere.
Los menores a esa edad exigen más dependencia en cuanto al manejo de los cubiertos, lo que suele inquietar a los padres por los posibles "desastres" a la vista: cara y ropa manchada, comida en el suelo y finalmente, el plato en el suelo. Sin embargo, es recomendable que los padres respeten al niño en su difícil tarea de aprender a comer como un adulto, ya que eso contribuirá a hacer de la hora de la comida un momento placentero para el menor. De lo contrario, las constantes peleas para lograr que el niño coma "todo en orden" terminará a la larga en un problema alimentario mucho mayor, haciendo que el niño asocie el momento de comer, con algo desagradable, y probablemente sólo le bastará con ver el plato de comida para ponerse a llorar.
Es muy importante que desde el principio los padres entiendan y apoyen la conducta de sus hijos en lo que respecta a la alimentación, pues así podrán crearle hábitos que propicien un aporte satisfactorio de nutrimentos; por eso, es importante conocer las distintas etapas por las que pasan los niños, para comprender mejor las pautas alimenticias y las exigencias nutricionales de cada momento.
En la edad preescolar, la que corresponde al periodo de 3 a 6 años, el niño ya ha alcanzado una madurez completa de los órganos y sistemas que intervienen en la digestión, absorción y metabolismo de los nutrientes. Es una etapa de crecimiento más lento y estable, en la que los niños ganan una media de 2 quilos de peso, y de 5 a 6 cm. de talla, al año.
En esta etapa, los niños desarrollan una gran actividad física, por la que su gasto energético aumentará considerablemente, y por lo que deberá adaptar su consumo de calorías a la nueva realidad.
CARACTERISTICAS DE LOS NIÑOS
- Cambio negativo en el apetito y en el interés por los alimentos.
- Periodo madurativo: rápido aprendizaje del lenguaje.
- A los 3 años, madurez de la mayoría de los órganos y sistemas similar al adulto.
El niño preescolar puede reconocer y elegir los alimentos al igual que el adulto. Normalmente, el niño tiende a comer lo que ve comer a sus padres y a otras personas que le acompañan. Ellos observan e imitan, también en la alimentación.
Según la nutricionista Fanny de Cardoze, es importante que el niño en edad preescolar y escolar mantenga una buena alimentación para su desarrollo físico y mental. Ahora bien, en cuanto a las necesidades nutricionales, la alimentación del preescolar entre los dos y cinco años debe incluir: lácteos, pescados, carnes, huevos o legumbres: optar entre una presa chica de pescado, 1/2 trozo de pollo, un bistec chico, un huevo o ½ taza de leguminosas, frutas, cereales, pastas o papas.
Agregó que se debe evitar darle a los niños grasas, enlatados y alimentos procesados.
La actividad física también es muy importante durante estas etapas del niño, ya que favorecen el crecimiento y desarrollo óptimo.
VENTAJAS DE UN BUEN DESAYUNO
Las ventajas de un buen desayuno:
- Mejora el rendimiento físico y escolar.
- Ayuda a mantener un peso corporal normal.
- Mejora la concentración y el comportamiento.
- Aumenta el rendimiento y la productividad en el trabajo.
- Contribuye a tener un buen estado de salud.