El secretario de Estado estadounidense, Colin Powell, advirtió ante la Conferencia sobre Antisemitismo de la OSCE, de que criticar a Israel no es antisemita, pero sí lo es satanizarlo o vilipendiar a sus representantes.
"Hay fronteras" a la crítica, como son las caricaturas o la burla a sus políticos, dijo Powell, para quien no se puede tratar de justificar las actitudes antisemitas como un "daño colateral" de otros conflictos, añadió, en alusión a la crisis en Oriente Medio.