Amante de las carreras automovilísticas extremas que ves a través de la televisión, pues de seguro no te perderás este variado y divertido esparcimiento, porque ahora tú también lo puedes hacer.
¡Claro!, habrás escuchado de la "Emoción de ser piloto", en la que sólo necesitas un buen control del volante, habilidad y concentración.
Esta fascinante recreación ha llamado la atención de todos los que les gusta sentir adrenalina en su cuerpo, a través de la aceleración en los diferentes kartismo (carrera bajo techo).
EMOCION Y ACELERACION
Toda la emoción se desarrolla en una gran pista de carros bajo techo, y apenas manejes y aceleres, te sentirás como todo un piloto profesional.
Esta pista existe en Panamá por la empresa, Carrusel Enterprise S.A, y su encargado, Juan Camilo Montero comentó que para participar de esta gran experiencia, sólo tienes que visitar las instalaciones de Star Kart ubicado en el Centro Comercial Auto Depot, frente a El Crisol.
Está funcionando desde el 15 de enero, en horarios de 5:00 a 11:00 p.m. los lunes; de martes a jueves de 12:00 a 11:00 p.m. y los fines de semana de 10:00 a.m. a 12:00 media noche.
¿COMO UTILIZAR LOS VEHICULOS?
Al llegar a este sitio deberás comprar un ticket, el cual varía de acuerdo a los minutos que vayas a utilizar; los precios van desde B/.4.00 hasta B/.12.00. Pero, si alquilas el local por una hora, tendrás que pagar B/.300.00. Así que, debes aprovechar el tiempo al máximo.
Si vas por primera vez, es obligación que veas un pequeño video en donde te presentan cada una de las reglas a seguir para poder conducir y entrar a la pista, si no sigues las normas, serás descalificado y tendrás que salir para evitar cualquier accidente.
Si deseas participar de una de las competencias que se realizan, sólo tienes que asistir a Star Kart, luego los encargados seleccionan al participante dependiendo la categoría, y, ¡A correr se ha dicho!. Ya lo sabes, asiste y disfruta de esta nueva manera de diversión. ¡Ah!, pero si deseas, puedes pasar a la cafetería y refrescarte un poco después de esas agotadoras vueltas...