La dividida oposición venezolana acordó participar en un proceso de ratificación de más de un millón de firmas que apoyaron su petición de referendo contra el presidente Hugo Chávez, en un paso indispensable para celebrar la consulta en agosto.
La Coordinadora Democrática (CD) había expresado dudas sobre el proceso convocado para entre el 27 y el 31 de mayo, debido a que consideraban que es un obstáculo impuesto por partidarios de Chávez para impedir el referendo.
La oposición debe lograr que sean ratificadas más de 500.000 firmas para poder alcanzar las 2,4 millones requeridas para que sea convocada la consulta, que de ser adversa a Chávez pondría fin a su mandato, que culmina en enero del 2007.