El juez español Baltasar Garzón acusó a un fugitivo marroquí (buscado por los atentados de Madrid del mes pasado) de colaborar en la planificación de los ataques a Nueva York y Washington de septiembre de 2001.
Garzón señaló que Amer Azizi participó en la organización de un encuentro en julio de 2001 al que asistieron varios de los principales implicados en los atentados del 11 de septiembre. Azizi fue acusado de pertenecer a la red Al Qaeda.
El ministerio del interior español publicó una foto de Azizi, señalando que se trataba de un sospechoso de planificar los atentados del 11 de marzo en Madrid, que provocaron la muerte de 191 personas.