En la provincia de Colón se encuentran cuatro importantes áreas protegidas por funcionarios de la Autoridad Nacional del Ambiente, todas con acceso directo a los visitantes y que cuentan con facilidades para pasar un momento en familia.
Los sitios conservados son El Parque Nacional Portobelo, el Parque San Lorenzo, El Parque Nacional Lago Gatún e Isla Galeta, recinto donde se encuentra un laboratorio marino donde se estudia la flora y fauna del lugar.
Los programas de conservación de ANAM incluyen en cada área protegida un técnico y guardaparques de la institución que son garantes de que la mano del hombre no destruya esa riqueza ecológica que otros países envidian y donde están los pulmones que nos suministran el oxígeno.
José del Carmen Montenegro, ingeniero y director regional de ANAM, explicó que todas esas áreas tienen programas de visita y cuando son excursiones se requiere de un aviso escrito a las instituciones para coordinar la llegada.
Las únicas regiones donde por ley se debe pagar un gravamen es en Isla Galeta y el Área Recreativa del Lago Gatún, donde los niños pagan 50 centésimos, los adultos 1 balboa y los extranjeros 3 balboas.
La labor de los guardaparques es importante porque de ellos depende que no se realice la caza de animales ni la tala de árboles que son fuente principal de la vida en esos sectores. Todos esos sitios se encuentran dentro de los itinerarios de las excursiones que se preparan para nacionales y extranjeros.
El Parque Nacional Portobelo tiene un total de 35 mil 929 hectáreas con una topografía muy complicada y con el Cerro Bruja de 900 metros de altitud como el punto más alto, siendo parte de la Sierra Llorona, territorio de la provincia de Panamá.
Desde el área recreativa del Lago Gatún se puede hacer un viaje por todo el lago y llegar desde Colón a Capira, La Chorrera y todas las poblaciones que están en esa zona.
