P: Mi hijo está en quinto grado, pero casi todos los días su mochila está repleta de libros. Me preocupan los posibles efectos que una mochila pesada pueda tener en su espalda. ¿Es el peso dañino? ¿Podría hacer algo al respecto?.
R: Muchos niños mientras van y vienen de la escuela parece que tienen el peso del mundo entero sobre sus hombros. Aunque los libros de texto escolares no sean tan pesados, algunos chicos llevan mucho peso en sus mochilas. Estas cargas pesadas ponen mucho estrés en su espina dorsal y hombres, causando dolor muscular y fatiga. Para algunos niños, los dolores son lo suficientemente fuertes como para consultar a un médico. De hecho, durante el año 2000 se tratarán más de 21.000 casos relacionados con las mochilas. El sobrepeso también puede llevar a tomar malos hábitos como mala postura o andar excesivamente encorvado. Las mochilas pesadas son malas para los niños, debido al peso mismo de la mochila que se relaciona directamente con el peso del niño. Los niños son fuertes, pero no poseen la masa muscular que tienen los adultos. Los músculos de la espalda no son los más fuertes del cuerpo; esa es la razón por la que a los adultos se les recomienda levantar peso con la ayuda de sus piernas flexionadas y también se aconseja fortalecer los músculos abdominales.
Muchos niños todavía no han aprendido a hacer esto. Por lo que si la mochila es muy pesada, sobrecarga los músculos de la espalda y causa dolor muscular. Al contrario de las mochilas que los niños usan para la escuela, las mochilas para ir a la montaña y de campamento tienen una estructura determinada y un cinturón que están diseñados para distribuir el peso entre las caderas y las piernas.
En las respuestas que se recopilaron en un sondeo reciente, más de la mitad de los miembros de la Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos dijeron que los problemas surgen cuando el peso de la mochila excede el 20% del peso del niño. Respondiendo a una segunda pregunta, la mitad confirmó que las mochilas que pesan 10 kilos o más son excesivamente pesadas.
Una forma de decidir si la mochila de su hijo es demasiado pesada es observarle corriendo con la mochila, puesta. Si puede correr sin dificultad significa que no es demasiado pesada. Incluso si no pueden correr fácilmente con ella encima, y tan sólo la carga unos minutos para subir y bajar del autobús escolar, probablemente esté bien. Pero si el niño que acarrea los 10 kilos de libros tiene que andar 1 kilómetro para llegar a casa desde la escuela y va encorvado todo el camino, porque tiene que aguantar todo el peso, corre riesgo de sufrir algún dolor de espalda u hombros.
Desafortunadamente, hacer deberes y estar preparado para las clases significa que tienen que transportar libros de casa al colegio y del colegio a la casa. Usted puede ayudar a su hijo a aligerar su carga al enseñarle métodos para organizarse. Si utiliza carpetas individuales para cada asignatura su hijo puede traer a casa tan sólo el trabajo que necesita hacer ese día en vez de traer todo lo que tiene.
También puede comprar una mochila adecuada y seguir ciertos parámetros para su uso apropiado:
Una mochila no debe colgar más de cinco centímetros por debajo de la cintura. Cuanto más bajo cuelga la mochila, mayor peso deben aguantar los hombros. De hecho, según la Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos la medida ideal para colgar una mochila es de 5 centímetros por encima de la cintura.
Compre una mochila con tirantes almohadillados y anchos para prevenir que los tirantes se le hundan en sus hombros.
Puntualice la importancia de usar siempre ambos tirantes de la mochila, apretados firmemente. Si su hijo sólo usa un tirante, todo el peso está concentrado en una sola parte de la espalda, lo que produce dolor en la parte inferior de la misma y puede entonces padecer de espasmos musculares.
Cuando se acarrea mucho peso debe usarse un tirante en la cadera que distribuye el peso equilibradamente en la espalda y las caderas.
Los elementos más pesados deben meterse primero para estar más cerca de la espalda.
Cuando su hijo levante una mochila pesada debe recordar doblar sus rodillas y usar sus piernas para levantarla.
No sobrecargue la mochila. Su hijo nunca debe llevar más del 15 ó 20% de su propio peso. Compruebe que su hijo no lleva en la mochila nada innecesario. Mire en la mochila y saque todo lo que pueda quedarse en casa, como por ejemplo papeles de otros días o basura.
Considere comprar una mochila con ruedas o compre los libros por duplicado para dejar una copia en casa.
El seguir estos consejos, puede ayudar a su hijo a prevenir algunos de los dolores asociados con cargar mucho peso. Y al establecer buenos hábitos su hijo podrá evitar el dolor de espalda más tarde en su vida.