Centenares de personas vinculadas a un grupo musulmán radical fueron arrestadas en Kabul en días pasados por su presunta vinculación a una conspiración para desestabilizar el gobierno del primer ministro interino Hamid Karzai, dijeron las autoridades afganas.
El plan, considerado el de mayor amenaza para el aún frágil gobierno de Karzai, incluía planes para provocar atentados con bombas por toda la capital, dijo el general Din Muhammad Jurat, director general de seguridad del Ministerio del Interior.
Agregó que la mayoría de los arrestados eran miembros de Hezb-e-Islami, un grupo radical islámico que encabezaba el ex primer ministro Gulbuddin Hekmatyar.
"Deseaban lanzar un golpe de estado contra el gobierno", afirmó Mohammed Naseer, director de seguridad de la oficina del gobernador en Kabúl. Naseer indicó que han arrestado a 350 personas, en su mayoría en los tres últimos días. "Fueron vinculados tanto a Al Qaeda como a Gulbuddin Hekmatyar", dijo Naseer.
La Fuerza Internacional de Asistencia de Seguridad (ISAF) no participó directamente en las detenciones, pero cooperó en darle prioridad a los arrestos. |