Las familias que aún permanecen dentro de los linderos de la cantera ubicada en el corregimiento de El Coco, en La Chorrera, se niegan a abandonar sus casas.
Ellos alegan que El Coco en el sector de Potrero Grande, donde serían reubicados, carece de agua potable, carreteras y electricidad.
Estas familias viven dentro de una parte del área de concesión de la cantera, la cual aún no ha sido explotada por la empresa.
Yojaris Quintero quien vive en una casa de zinc y piso de tierra, dijo que meses atrás se les comunicó por parte de la empresa, la entrega de B/.80.00 para colaborar con los gasto de mudanza lo cual incluía trasladar los materiales con que estaba construida la casa, pero todo quedo en promesas.
Otro de los inconvenientes de mudarse es la falta de transporte, ya que deben caminar 30 minutos para conseguir un bus.