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Quizás el verbo "sacar" no es el más apropiado para titular este escrito, pero es lo que más se acerca para definir cuando un muchacho no sale con su pareja a pasear muy a menudo. Existe gran cantidad de personas con diferentes personalidades. A unos les gusta la música y a otros, la soledad.
En cambio, hay quienes tienen los mismos gustos de su novia y quizás funcione, pero el colmo de los males es que alguien se enamore de una chica, se le insinúe y le propone un noviazgo, pero ya siendo novios, no sale ni a la esquina con la chica. Criticable desde todo punto de vista que una pareja no comparta momentos con la naturaleza o vaya al cine a ver una película de estreno.
Si usted es uno de estos hombres de las cavernas, tengo que darle una mala noticia: "No durará más de un mes con la chica". Otro de los ejemplos que caben en esta crítica es el que aplican ciertos profesionales que se aprovechan que el ambiente donde laboran reciben invitaciones a cócteles, bufetes o almuerzos y es entonces cuando invitan a su chica diciendo: "Mami, te invito a un bufete hoy".
Este tipo de personas vive un mundo de ilusiones. No tienen dónde caerse muertos y se la pasan aparentando que se codean con el mundo de la farándula. Lo peor es cuando invitan a la casa de sus padres a la chica. Ellos saben que no tienen que gastar ni un real si Mama Juana es la que prepara todo con la plata del viejo.
Amigo, viva la realidad. No se esté engañando usted y no lo haga con su novia. Al final, tarde o temprano, ella dirá: "Este muchacho si me está mintiendo ahora, ya me imagino lo que hará si me caso con él, así que mejor termino hoy mismo". Recuerde que cuando uno ama lo hace sin esperar nada a cambio. |
