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José María Aznar contra las cuerdas.  |
En España, las hasta ahora inquebrantables filas del gobernante Partido Popular están mostrando las primeras fisuras. El goteo de dimisiones de representantes de este partido se suma a las constantes manifestaciones ciudadanas en contra de la guerra. Según las últimas encuestas realizadas en España, un 91% de la población rechaza la guerra contra Irak.
Los españoles no comprenden por qué su máximo representante político se ha alineado a las tesis defendidas por la administración de George Bush y no se cansan de gritar por la paz, a pesar de no ser escuchados.
La ciudadanía española está más viva y enfadada que nunca. La oposición también ha demostrado una unidad increíble. Las sesiones especiales celebradas en el Congreso de los Diputados y dedicadas íntegramente a Irak, han sido el mejor termómetro para medir la intensidad de las divisiones.
Antes de comenzar la guerra todos los diputados del PP votaron en apoyo a la política del Gobierno con respecto a este conflicto. En este tenso ambiente, el Partido Popular resistía las criticas cerrando filas. Pero la guerra ya ha comenzado y el recuento de víctimas civiles también.
Paralelamente a la intensificación de la ofensiva militar contra Irak los ánimos de un país, en el que la calle va por un lado y el Gobierno por el contrario, se han ido caldeando. Las sedes del Partido Popular son el destino final de muchas manifestaciones y los ataques contra los concejales del PP se multiplican.
En los últimos días, la unidad del partido de José María Aznar ha empezado a resquebrajarse. Las críticas se filtran mientras prosigue un lento pero constante goteo de dimisiones.
En Andalucía, el número de concejales dimisionarios asciende a 13, y los sondeos sobre la intención de voto para las elecciones municipales y autonómicas del próximo 25 de mayo pronostican un duro revés para el Partido Popular.
José María Aznar ya había hecho pública su intención de no repetir candidatura en los próximos comicios generales. Otros padecerán las consecuencias de su apuesta en esta guerra preventiva contra Irak. |
