La emoción del primer día de clases de un hijo es inexplicable, más que nada para aquellos padres que no se dieron cuenta cuando sus niños pasaron de ser bebés a niños "más grandes".
Son muchas las experiencias que ellos viven en la escuela, llegan a la casa comentando todo lo que les pasó, desde las enseñanzas hasta sus juegos de recreo.
Sin embargo, ¿qué pasa cuando llega esa etapa en que los maestros asignan algunas tareas para hacer en casa pero el niño se siente con ganas de una siesta?, ¿cómo deben proceder los padres o la persona que está a su cuidado?
En este sentido, los expertos en el tema consideran necesario que el niño descanse, porque el proceso de levantarse, en ocasiones, a horas muy temprana, puede generar algo de cansancio, luego de la rutina escolar.
Aseguran también que es necesario que al infante se le asignen tareas para desarrollar en casa, para que estos vayan tomando responsabilidad con relación a los estudios, y también para que los padres se involucren.
Generalmente, todos están de acuerdo en que cuanto más pequeño es el niño o niña, debe ser menor el tiempo dedicado a las tareas escolares. Una regla empírica general es que los niños hagan 10 minutos de asignaciones por cada nivel escolar.
Sin embargo, hay dos estrategias claves que los padres pueden usar para reducir los problemas con las tareas escolares. La primera es establecer rutinas claras sobre las tareas escolares, incluyendo cuándo y dónde se realizarán y estableciendo horarios diarios para las tareas. La segunda es establecer recompensas o incentivos para los niños, aunque no se debe hacer costumbre.
FELIZ HACIENDO TAREA
Durante el tiempo que el niño se encuentra en el colegio se siente contento haciendo las tareas junto a sus compañeros, por eso, usted debe crear un ambiente similar, para ello debe:
Designar un lugar en la casa en donde el pequeño no tenga distracciones. Puede ser su cuarto, en donde también sentirá privacidad.
Si para vigilarlos usted lo pone a hacer sus deberes en el comedor, entonces procure que no haya nada en la mesa. Floreros o jarras de agua que puedan ocasionar un accidente.
No olvide que para determinar cuál será ese espacio, usted debe conversar con su niño o niña.
Cuando su hijo(a) avance de manera eficiente en los deberes, estimúlelos con frases como: ¡Qué bien!, ¡Está bonito!, ¡Vaya amor!, ¡Así se hace! De esta forma le gustará estudiar y hacer tareas; y sabe que sus "papitos" están contentos.
Ahora, como padres de familia, no olviden que para que sus niños respondan bien en sus deberes escolares deben: dormir temprano, desayunar muy bien, llevar una merienda saludable, y dormir una siesta.