La piedra pómez también conocida como "pumita", es un tipo de roca ígnea de origen volcánico.
Dentro de sus características están su poco peso, es liviana y, a diferencia de otras rocas, esta puede flotar en el agua. Además, es porosa y puede tener colores con tonalidades entre gris, blanca o negra.
Es extraída de la lava fría que procede de las erupciones volcánicas. En las zonas cercanas al Volcán Barú, se pueden encontrar este tipo de piedras que datan de hace miles de años.
Según los vulcanólogos, la lluvia de piedras pómez son muy comunes en las erupciones volcánicas de tipo vesubiano. Cuando ocurre este tipo de suceso natural se pueden sepultar grandes extensiones de terreno.
Esta piedra es útil para eliminar las callosidades que salen en los pies y en las manos. Se recomienda usarla cada 7 o 10 días para mejorar la condición de la piel en estas zonas del cuerpo humano. También puede emplearse en el área de la construcción y en las actividades relacionadas con la industria.
En países como Nicaragua, los artesanos extraen la piedra pómez y luego las recortan para confeccionar una figura de forma cuadrada; posteriormente las ponen a la venta.