¿Sabías que el miembro sexual
masculino puede romperse en los momentos más sensuales e íntimos?
CUIDADO... QUE SE ROMPE
Aunque resulte difícil de creer, el pene del varón se puede fracturar durante la relación
sexual, la masturbación, una riña o por maniobras bruscas y ningún hombre está exento
de ello.
La Clínica de Disfunciones Sexuales refiere que hasta la fecha, en México se han registrado 400
casos de ruptura de pene que han requerido de hospitalización y cirugía.
Esta lesión es considerada por los especialistas como un caso de urgencia ya que se rompen algunos conductos,
cuerpos cavernosos o cilindros del miembro sexual masculino durante la erección explicó Jorge Jaspersen
Gastelum, jefe de la clínica de Disfunciones Sexuales del Hospital General de México.
CRACK... EL CHASQUIDO
"El paciente escucha un craquido o chasquido, hay dolor intenso que en ocasiones se percibe a pesar de la
excitación, hay moretones y equímosis o deformidades dado que se acumula la sangre en el sitio",
detalló.
Por lo general, las fracturas son pequeñas aunque advirtió, se han presentado casos en los que se
secciona todo el cuerpo cavernoso y la uretra. El resultado: un pene deforme o con curvatura.
POSTURAS DE CUIDADO
El pene es sensible durante su estado rígido si no se tienen los debidos cuidados en su manipulación
o uso, basta recordar que, de acuerdo con la compañía Durex, durante la erección, los cuerpos
cavernosos se llenan con 25 ó 50 centímetros cúbicos de sangre que viaja a una velocidad de 90
kilómetros por hora, se engrosa a más del doble y llega a medir entre 8.8 y 20 centímetros,
aunque se han documentado casos en los que se hablan de 33 centímetros.
Investigaciones han demostrado que por las características que adquiere el miembro sexual, aquellos momentos de
pasión y éxtasis son los más riesgosos pues se pierde la dimensión y el control,
comentó el también miembro de la Sociedad Mexicana de Urología.
"Las posiciones forzadas influyen, en ellas no se penetra libremente sino que hace un ángulo en el canal
vaginal ante la longitud del pene y viene una flexión", indicó.
La posición más peligrosa es la llamada del jinete, en la que la mujer está sobre el hombre; en
ocasiones, ella se impulsa hacia arriba y al caer, el pene no penetra en la vagina, sino que choca con el tejido y
se produce la fractura.
El especialista añade que todas las posturas que impliquen una falta de cálculo o coordinación
son delicadas y se consideran factor de riesgo para el varón, al igual que la masturbación inadecuada o la
manipulación ruda del pene, de hecho, es común en los pacientes con problemas psiquiátricos que flexionan su pene como autocastigo.
"Los varones adolescentes también están propensos a este tipo de lesión", agregó Jaspersen,
"porque atraviesan por una edad en la que desean penetrar algo, cualquier orificio y lo hacen con rudeza.
Están descubriendo su sexualidad".
NI CULPARLOS
Se puede llegar a creer que la complexión física de la pareja o del afectado influyen para que se de
el accidente, lo cierto es que en este tipo de lesiones, no interviene la obesidad o delgadez ni la longitud o el
grosor del pene. El daño se presenta por el inadecuado alineamiento entre el canal vaginal y la longitud del pene.
DEL GOZO AL POZO
Del éxtasis que genera la relación sexual se pasa a la angustia de ir al hospital. La fractura de
pene no sana sola, se requiere de una cirugía que dura en promedio una hora, tiempo en el cual, el médico
evalúa la lesión, es decir, si se produjo en la parte media o en la base, se drena la sangre acumulada
en el interior del pene y sutura el o los canales dañados. |