Si un muchacho ve que sus padres son perezosos, apáticos, cochinos, alcohólicos y desinteresados por todo, van a repetir esas conductas.
¿Cómo esperar que un chico sea amante del estudio, el deporte sano, la cultura, el trabajo honrado y patriótico, si sus padres le han mostrado con su ejemplo que eso no vale la pena?
La sociedad de mañana será lo que la de hoy planifique. Y una forma de planificación es el ejemplo. Es como programar una computadora. La generación venidera está siendo diseñada por las conductas de hoy, por los ejemplos que hoy se están poniendo a la muchachada.
Es preciso que nos comportemos adecuadamente a estas alturas, porque mañana será demasiado tarde.
Decir que los de antes eran tiempos mejores que los de hoy es una falacia: no son más que la causa de lo que actualmente tenemos. Los adultos de ayer programaron a la actual sociedad en sus valores patrióticos y productivos.
Hay que hacerlo mejor para mañana. |