Mientras el reloj biológico avanza sin piedad, la ciencia intenta que el tic tac marque cada vez más lento.
La realidad es que hombres y mujeres entre 20 y 30 años no toman la salud como un asunto prioritario. Sin embargo, al llegar a los 40, los síntomas de la edad se hacen más evidentes, y cuando llega este punto, es entonces que la mentalidad cambia. Sin embargo, existe un programa médico que se está utilizando para mejorar la calidad de vida, tener mayor vigor y vitalidad cuando los años comienzan a caer.
No se trata de una fórmula mágica que detiene el proceso de envejecimiento, es una realidad desarrollada científicamente, basada en la prevención con ayuda de hormonas del crecimiento.
El programa es conocido como Age Management o Gerencia de la Edad y como su nombre lo indica nos convierte en una especie de directores o gerentes de nuestra edad. El tratamiento está destinado a cambiar la mentalidad y los estilos de vida, pensando que el envejecimiento es una gran empresa, la cual debemos gerenciar adecuadamente para que evolucione de forma saludable. De esta forma, mientras más jóvenes tomemos el control de esa empresa, mayores beneficios obtendremos en el futuro. El programa está diseñado para personas entre los 30 y 90 años.
Su pionero en este país es Michael Sigler, un cirujano norteamericano de 30 años, quien dejó a un lado las operaciones del corazón que realizaba en el Hospital Jackson Memorial, de Miami; y el Hospital Monte Sinaí, de Nueva York; para entrenar a otros médicos en el Instituto Cenegics de los Estados Unidos, centro que desarrolló el Age Management, certificado por la Asociación de Medicina norteamericana.
Sigler asegura que el auge económico, mezclado con una dosis sentimental (su esposa es panameña) enrumbaron su futuro hacia nuestro país hace un año y medio, cuando abandonó los Estados Unidos y decidió establecer el Age Management en el Hospital Punta Pacífica. La aceptación que ha tenido el programa lo ha motivado a ampliar su centro de trabajo tanto en Panamá como en el resto de Latinoamérica.
Su expansión va dirigida hacia el sur, específicamente hacia Argentina y Uruguay, y no descarta brindar entrenamientos a médicos de Costa Rica y Ecuador. También espera que en un futuro próximo pueda ofrecer charlas a estudiantes de las universidades sobre esta nueva especialidad médica.