Saludos amigos y amigas del béisbol, bienvenidos a otra faena de la pelota criolla, hoy en el viernes de cucarachas, donde muchos panameños salen con la esperanza de vivir un buen rato, disfrutar del ambiente, asistir a los estadios y apoyar a sus equipos.
Ayer conversamos con dos protagonistas del presente, dos elementos vinculados a las grandes hazañas de las últimas 38 horas y al sueño feliz que se llama Grandes Ligas.
¡MADRE JONRONERA!
Sonó el teléfono y al otro lado del cordón enrollado, nacía la voz de una mujer humilde, agradable y de mucho respeto.
Era Mileika Ruiz, la madre de Christian Betancourth que con una sonrisa confirmaba la firma de su hijo, como pelotero profesional.
La madre del pelotero vivía un gran momento emocional, pues uno de los sueños de su hijo se hacía realidad. "Me siento contenta", dijo la orgullosa progenitora del talentoso pelotero que se va a la finca de los Bravos de Atlanta. El bono de firma de Betancourt es de los más grandes de la historia e incluye una beca para estudios, por recomendación de la señora Mileika.
¡Buen trabajo, felicidades!
LA VOZ DE LA EXPERIENCIA..
Hablamos también con la voz de la experiencia, esa leyenda viviente, con mucho recorrido en la pelota profesional.
Allí estaba Mr. Robert Rowley, un cazador de talentos, reconocido nacional e internacionalmente.
Estaba muy feliz y saltaba en un solo pie, por el ascenso que recibió Luis Durango y la oportunidad de jugar en un partido de pre temporada con los Padres de San Diego.
Rowley firmó a Durango por 12 mil dólares, apostando a la velocidad del jugador y a su astucia para jugar a la pelota.
UNA CORTITA..
Johnny Lasso despachó dos jonrones en un solo partido, el miércoles en la noche en el Justino Salinas.
Fue una gran hazaña que no se daba desde los tiempos del "Duque" Luis Muñoz.
¡Viva, el béisbol!