Las fuertes lluvias caídas ayer en Buenos Aires y su populoso cinturón urbano provocaron inundaciones y cortes de energía eléctrica, además que afectaron los medios de transporte y causaron un caos de tráfico.
Las precipitaciones, que comenzaron en la madrugada y se intensificaron durante la jornada, han obligado a vecinos de diferentes barrios de la capital argentina a colocar empalizadas para evitar que el agua ingrese en sus viviendas.
A raíz de la tormenta, que según los pronósticos meteorológicos se prolongará hasta ayer, también se registran cortes de luz en distintas zonas de Buenos Aires y sus alrededores, según informaciones difundidas por medios de prensa locales.
Además, por las lluvias sufren retrasos o directamente fueron suspendidos los servicios de metro y de ferrocarriles metropolitanos, mientras que se acumuló agua en algunos accesos a la ciudad, varias avenidas y calles.
La asociación empresarial Fedecámaras indicó que "más de 50, 000 comercios minoristas de la capital y 80, 000 del Gran Buenos Aires sufrieron cuantiosas pérdidas, más del 30 por ciento de la mercadería, debido al fuerte temporal".
Los empleados y propietarios se vieron sorprendidos por la intensa precipitación y no pudieron llegar a tiempo para salvar sus pertenencias, explicó el presidente de Fedecámaras, Rubén Manusovich.
El dirigente anticipó que los comerciantes van a pedir indemnizaciones a las autoridades y exenciones impositivas sobre la mercadería pérdida.
Agregó que "hay mucha gente sin luz y cables caídos, por lo que el panorama se complica aún más". Hasta ahora se han reportado más de 600 evacuados en la periferia de Buenos Aires.
REPORTE DE EVACUADOS
600 personas fueron trasladas a lugares mas seguros debido al peligro que corrían en sus casas. La lluvia sorprendió ayer en la madrugada a los argentinos.