El río Curundú se encuentra lleno de desechos y malos olores, sin que las autoridades le pongan atención. Este río contaminado podría causar una epidemia en el sector, afectando mayormente a los niños, mujeres y ancianos, los más delicados en estas situaciones.
El río, que tiene gran cantidad de basura en su cauce, ocasiona además molestias a los vendedores del vecino Mercado de Abatos. Esperemos q ue las autoridades hagan algo.