El gobierno brasileño ordenó al ejército federal ayudar en la seguridad de Río de Janeiro, un día antes del inicio del tradicional carnaval en esta ciudad, cuya celebración se ha visto amenazada por una ola de violencia desatada por bandas delictivas.
Expertos en seguridad dijeron que sería la primera vez que el carnaval de Río de Janeiro --una colorida fiesta de danzas y bailes-- se celebra bajo la vigilancia del ejército. La orden destaca también el poder que han adquirido las bandas de traficantes de armas y drogas.
"Hasta donde recuerdo, este es el primer carnaval con el ejército en las calles, algo que ni siquiera se hizo durante las dictaduras militares", dijo Julita Lengruber, una experta en seguridad de la Universidad Candido Mendes en Río de Janeiro.
Por el temor a la violencia vinculada a las bandas de narcotraficantes, Río debió recurrir dos veces a las tropas del ejército en los últimos cinco meses durante las elecciones presidenciales. La jornada electoral se llevó a cabo sin dificultades.
El ministro de Justicia, Marcio Bastos, dijo que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva aprobó el pedido de tropas federales efectuado por la gobernadora del estado de Río de Janeiro. |