El posible cierre del Mercado Agrícola Central es la advertencia lanzada por el Ministerio de Salud, ante los altos niveles de contaminación que fueron detectados durante una inspección sanitaria efectuada ayer.
Olores nauseabundos, aguas estancadas, heces fecales que merodean los módulos de venta, frutas y alimentos en el piso y acumulación de basura es el ambiente malsano que rodea esta instalación pública donde se mercadea alimentos y productos del agro.
Jorge Hassán, director de la Región Metropolitana de Salud, culpó a la administración del Mercado de Abastos de mantener consistentemente la situación de insalubridad que atenta contra la salud de los panameños.
"Nuestra intención no perjudica a los vendedores ni productores, pero hacemos recomendaciones a la administración para que se corrijan y encontramos las mismas deficiencias", indicó.
En medio del operativo, las autoridades de Salud, la administración del mercado y hasta algunos vendedores se echaban unos a otros la "pelota" sobre la situación deficiente sanitaria.
César Batista, administrador del mercado, de la Alcaldía de Panamá, insinuó que las acciones efectuadas por el Ministerio de Salud, en los diferentes mercados, sea una persecución política en contra del alcalde Bosco Ricardo Vallarino.
Batista, en tono bastante enojado, dijo que la administración ha tratado de mejorar las condiciones higiénicas; sin embargo, siente que Salud no es constante en sus inspecciones, ni los ayudan en el trabajo de concienciación para que los vendedores cumplan con las reglas higiénicas.
Hassán y Batista se pusieron de acuerdo para que la próxima semana se haga una inspección. En cumplimiento con una solicitud del MINSA, el mercado habilitará 30 nuevos módulos para vendedores del Mercado que aún no tienen cubículo.
Se espera que para hoy cuadrillas del IDAAN limpien los canales de desagüe de aguas servidas que pasan por el Mercado Agrícola Central.