La Basílica Menor de Atalaya se encuentra repleta de fieles devotos del Cristo milagroso Jesús Nazareno.
Muchas personas decidieron iniciar el peregrinaje hace algunos días para poder postrarse sin problemas ante los pies del santo y agradecerle por los milagros concedidos.
Otros viajaron desde áreas muy distantes para llegar al templo a pedir por la salud de algún familiar enfermo, por mejores días en el hogar, entre otras peticiones.
Ante el incremento de personas en Atalaya, la Policía Nacional tuvo que reforzar la vigilancia y la seguridad.